El loco enamorado

-Hola mi amor, ¿Cómo estas en esta bellísima noche donde la luna tiene un especial fulgor que inspira al amor y la pasión? (hablando mientras acerca su rostro y hablando en un tono poético y apasionado)

+Bien. (contestando un poco distante, pero mas que nada, con extrañeza)

-¿Bien como las nubes negras que rodean a la luna, figurandose a un puente hacia los más grandes sueños? ¿O bien como las rosas del jardín que atrapan con su encanto? (mantiene su postura, se acerca un poco más incluso)

+Pues... ¿Tu como estas? (retrocediendo su cuerpo, evandiendo su calido aliento a uva)

-Exelente, contento de poder estar en presencia de un ser tan maravilloso como los sos tu. (exaltandose ligeramente de alegría, sin mover su cuerpo, mas que arquear sus cejas)

+Hay bueno... Pero supongo que as estado con mejores personas. (Retrocediendo aun más su cuerpo)

-Tal vez, pero no creo que alguien pueda superarte en este momento de mi vida, y en este lugar de nuestro mundo.

+Estupendo, eso creo. Oyes, me debo ir, te veré otro día. (mientras se levanta de la banca tomando sus cosas)

-Me parece una maravillosa idea, te veré en el lugar y momento que el destino decida ponernos juntos. (poniéndose de pie de forma entusiasta)

+Bueno, adios. (se retira apresuradamente)

-¡Adios belleza encarnada! ¡Te veré pronto, sueño e ilusión de mi alma! (gritando con voz apasionada, como quien declama un poema, mientras bate su brazo en señal de despedida)


Jamas volvieron a toparse directamente, solo curces ocacionales que no daban tiempo a una expresión amorosa, muy apenas a un saludo, a un gesto.
Lentamente, el amor se fue marchitando, se fue desquebrajando como una casa que se cae por la edad, la humedad y el vandalismo.
En el ultimo encuentro, la mirada que se cruzanron, lo dijo todo "Ya no te amo, así, como tu nunca me amaste".

D.A.P.